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a crear los Hábitat
Un hábitat es un área en la que vive una especie particular de animal, planta u otro tipo de organismo.[1] Es el entorno natural en el que vive un organismo, o el entorno físico que rodea a una población.
Hábitats de animales[editar · editar código]
La mayoría de los animales viven en un tipo de entorno porque se adaptan mejor a él. Decimos que están 'adaptados a ese entorno'. Por ejemplo, animales como ranas, tritones y patos tienen patas palmeadas para ayudarles a nadar en el agua. Hay muchos tipos diferentes de hábitats y diferentes tipos de adaptaciones para adaptarse a cada uno.
Si el hábitat cambia, puede que ya no sea adecuado para los animales y las plantas que viven allí. Debido a los complejos vínculos entre las plantas y los animales, esto puede tener muchos efectos diferentes. El cambio climático está calentando algunos hábitats, por lo que muchas especies animales se están trasladando a áreas más frías. Sin embargo, algunas especies no pueden moverse y las poblaciones son cada vez más pequeñas. Los científicos creen que el 10% de las especies pueden extinguirse debido a estos cambios.
También se han limpiado otros hábitats para convertirlos en tierras de cultivo. En Australia, por ejemplo, el 80% de los bosques de eucalipto han sido talados para la agricultura en los últimos 210 años.[2] Esto está amenazando la supervivencia de animales del bosque como el koala.
Hábitats de plantas[editar · editar código]
Así como los animales se adaptan a los lugares donde viven, también lo hacen las plantas. Las plantas están adaptadas a una gran variedad de hábitats. Como resultado, cada planta tiene ciertas características. Algunas están adaptados a vivir en tierra, mientras que otras viven en el agua. Las plantas que crecen en la tierra generalmente tienen tallos rígidos para mantenerlas en posición vertical, mientras que las plantas acuáticas tienden a tener tallos menos rígidos porque el agua las soporta.
Las plantas que viven en climas secos como el desierto tienen pocas hojas o ninguna. Muchos, incluyendo los cactus, almacenan agua cuando llueve. Sus adaptaciones ahorran agua. Las plantas que crecen en áreas sombreadas tienen hojas grandes para capturar la mayor cantidad de luz solar posible, o escalan hacia la luz.