Microscopio electrónico
Un microscopio electrónico es aquél que utiliza electrones en lugar de fotones (luz normal) para formar imágenes de objetos diminutos. Los microscopios electrónicos permiten alcanzar ampliaciones hasta 5.100 veces mayores que los microscopios ópticos.
Un microscopio electrónico, como el de la imagen, funciona con un haz de electrones generados por un cañón electrónico. Los electrones son acelerados por una alta corriente eléctrica y empujados a formar un foco estrecho por medio de lentes magnéticas (todo ello en una cámara de alto vacío ya que los electrones son absorbidos por las moléculas de los gases que forman el aire).
Un rayo de electrones (foco), atraviesa la muestra que queremos ver ampliada y la amplificación se produce por un conjunto de lentes magnéticas que forman una imagen sobre una placa fotográfica o sobre una pantalla sensible al impacto de los electrones que transfiere la imagen formada a la pantalla de un ordenador.

Los microscopios electrónicos producen imágenes sin ninguna clase de información de color, puesto que el color es una propiedad de la luz y no hay una forma posible de reproducir este fenómeno mediante los electrones; sin embargo, es posible colorear las imágenes después, aplicando técnicas de retoque digital a través del ordenador.
Fuente[editar · editar código]
- Adaptado de Microscopio electrónico en Wikipedia